Los relatos potencian la imaginación y afectividad de los niños, a pesar de ello, la costumbre de contar historias a los más pequeños apenas perdura en algunos hogares.
Todavía las palabras «Érase una vez...» provocan efectos mágicos. Sin efectos especiales proyectados en una pantalla gigante. Sin imágenes animadas con las más modernas tecnologías. Sólo con la palabra y su misterioso hechizo, el cuento oral ejerce un poderoso y gratificante influjo sobre quien lo escucha, especialmente si se trata de un niño. De las pérdidas que acarrean la vida moderna y sus prisas, una de las más dolorosas es la del hábito de contar cuentos a los niños. La costumbre de narrar historias a los más pequeños apenas perdura en algunos hogares, ha sido delegada a la televisión, a los profesores de escuela infantil o a los cuentacuentos profesionales. «No me doy maña para eso», «Apenas me queda tiempo», «Qué les voy a contar yo que no lo puedan oír mejor por otros medios», se dicen muchos padres y madres que han renunciado a hacerlo.
Articulo publicado en Terra.es
2 comentarios:
HOLA ESTE ES UN SALUDO DESDE CHILE PARA TI Y CELEBRAR TU BLOG CON LA IMPORTANCIA QUE LE DAS A LA NARRACIÓN DE CUENTOS INFANTILES CON EL APRENDIZAJE EN LOS PEQUEÑOS.
¡SALUDOS DE LAS HADAS! Y DEJO LINK AQUI ABAJITO DE NUESTRO TRABAJO CON NIÑOS.http://narradoradecuentosinfantiles.blogspot.com/
Hola, estoy totalmetne de acuerdo , CONTAR CUENTOS ES ALGO QUE NO DEBEMOS PERDER, pero la profesora de mi sobrino no opina lo mismo, al parecer cuando le cuento algo debo dejarle claro que ES SOLO PRODUCTO DE MI IMAGINACION , es normal desmontar asi la inocencia e imaginación de un niño de 4 años??? acaso en los dibujos de la tele,se les advierte que nada de lo que van a ver es real??
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